EFE / Martín Alipaz

Mijaín López aspira cerrar su carrera en Tokio 2020

jueves, 30 de abril de 2020

La Habana, 30 de abril de 2020.- El tres veces campeón olímpico Mijaín López continúa su entrenamiento con la ilusión puesta en dar a su carrera deportiva un cierre estelar en los juegos olímpicos de Tokio 2020. El luchador grecorromano cubano, cinco veces campeón mundial, se ejercita confinado en su hogar.

La pandemia de la COVID-19 ha provocado la suspensión de los Juegos de Tokio 2020, que se prevé se puedan realizar en el verano de 2021. López declaró a la prensa cubana que se mantiene firme en su objetivo de participar por cuarta vez en una Olímpiada y así poder ganar una nueva presea dorada.

Mijaín López quiere dar el mejor cierre a su carrera

«Estoy motivado porque sé que puedo seguir contribuyendo a la historia del deporte en Cuba, y Tokio será una oportunidad única», declaró el luchador que compite en la división superpesada de los 130 kilogramos.

«Quiero darle el mejor cierre a mi carrera, estos Juegos Olímpicos no me los quita nadie», afirmó Mijaín López.

Recordó que cuando se confirmó el aplazamiento de la cita olímpica para el verano de 2021, su primera reacción fue «psicológica», porque ello supone que tendrá que entrenar por mucho.

«Ya tenía el peso controlado, y eso requiere sacrificio. La vida del atleta es muy dura, y más cuando te estás preparando para un gran acontecimiento. Sin embargo, la reacción es lo más importante», apuntó.

El cubano asegura que asumió el cambio de fecha de la olimpiada «tranquilo, siempre soy positivo» y que ahora solo le queda prepararse «mejor» y esperar a que pase esta pandemia, porque «la salud y la vida tienen prioridad».

Señaló que llegará a los próximos Juegos Olímpicos «con 39 años de edad y la maestría para lograr todo».

Trabajar duro y evitar lesiones

«La vida me dio salud y la forma deportiva que tengo para seguir trabajando duro y evitar lesiones», señaló y consideró que en este empeño tienen un peso tremendo sus familiares más allegados y amigos.

Además subrayó que cuando la retaguardia «está segura, uno asume más centrado lo que toca» y «saber que cuentas con un cuerpo de entrenadores de lo mejor del mundo, eso te da una gran seguridad».

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