La casi desconocida historia de los tanquistas cubanos que se enfrentaron a Israel en Siria

miércoles, 17 de octubre de 2018

Hasta hace muy poco tiempo el gobierno de Cuba lo negó; pero era un secreto a voces que la segunda misión que cumplieron las tropas cubanas en el extranjero tras el triunfo de la Revolución de 1959 fue en Siria.

Poco después de la Guerra del Yom Kipur en que Israel volvió a derrotar a los ineficientes ejércitos árabes, el gobierno de La Habana decidió enviar 800 tanquistas para apoyar a las fuerzas sirias. El estado árabe había realizado el pedido de ayuda luego de que los israelíes en su contraofensiva traspasaran el Golán. Damasco había pedido a Fidel Castro que les enviara pilotos de combate para su técnica soviética; pero el alto mando de las FAR juzgó que era un riesgo demasiado alto desprenderse de sus pilotos.

Entre octubre y noviembre de 1973 se desplazaron a Siria los tanquistas de la Isla con total discreción. En los momentos en que llegaron al país árabe los cubanos, ya el ejército israelí les había dado con todo a sus enemigos. Los tanquistas se encontraron con que los tanques T – 54 y T – 55 que debían operar se encontraban en malas condiciones, por los que tuvieron que invertir tiempo en repararlos; a la vez que se entrenaban para el combate en el desierto.

Sólo en marzo de 1974 los cubanos pasaron al frente de batalla con esa técnica. Al mes siguiente los oficiales fueron enviado pequeñas unidades al borde delantero para que participaran en los duelos artilleros con el ejército israelí y se fueran fogueando.

Sin embargo, ya la guerra terminaba. Los estados árabes se mostraron una vez más incapaces de derrotar a Israel y en junio de 1974 se firmó el alto al fuego entre los contendientes. Al año siguiente los tanquistas cubanos regresarían a la Isla.

Al igual que en Argelia, en Siria los cubanos tampoco sufrieron bajas. En parte por su pericia y organización; en parte porque en ambos casos se trató de conflictos que ya estaban en vías de solución y su presencia en el escenario fue casi testimonial.