Ernesto Lecuona, de Guanabacoa para el Mundo
martes, 14 de julio de 2020
Muchos grandes músicos españoles le han dedicado piezas a Cuba: Manuel de Falla, Joaquín Turina o Ernesto Halffter han escrito hermosas composiciones inspirados en la isla. Nada de raro tiene entonces que un compositor cubano, como Ernesto Lecuona (1895-1963), nativo de Guanabacoa, para más detalle, se halla inspirado en la España de la que estaba enamorado para escribir tantas piezas, que a veces creen que es un autor español.
Un prodigio musical de Guanabacoa
Desde niño destacó por su gran talento. Comenzó a estudiar música con su hermana Ernestina. Ya con más edad tuvo como maestros a Peyrellade de Blanck y Joaquin Nin. Con apenas 17 años, escribió su primera danza afrocubana, La Comparsa, estrenada en 1912 y conocida ahora mundialmente. Ese mismo año viajó a Estados Unidos para ofrecer un recital.
Triunfo en España
Lecuona viajó a España por primera vez en 1920, y desde entonces, la consideró su segunda patria. «Adoro a España», decía constantemente. El músico ofreció recitales en Madrid y Barcelona, además de otras importantes ciudades de la península.
De vuelta en Cuba, Ernesto Lecuona fundó junto a Gonzalo Roig la Orquesta Sinfónica de la Habana en 1922. A esta agrupación le donó su valioso archivo musical, que había recibido del Maestro Hubert de Blanck, .
En 1925 se estrena en Madrid su comedia musical titulada Radiomanía, que resultó todo un éxito. Luego vendrían La Revista del Eslava y Levántate y anda, que fue representada más de dos mil veces en el Teatro Martín. En la ciudad mediterránea de Valencia estrenó La Revista sin trajes y ¿Dónde está mi mujer?
El amor por España quedó plasmado en obras como la Suite Andalucía, pero especialmente en la inmortal Malagueña. En agradecimiento, las autoridades de Málaga, poco antes de su muerte, nombraron a Ernesto Lecuona hijo adoptivo de la ciudad. Una calle de la capital andaluza lleva su nombre, situada actualmente en el distrito 29006 de esa ciudad.
Ernesto Lecuona conquista el mundo
El éxito en España le abrió las puertas al mundo. Fue invitado por los estudios de Hollywood, para que ponerle música a algunos filmes. «Carnaval en Costa Rica», «Always in my heart» y «Siboney» se constituyeron en rotundos éxitos en los años cuarenta. Lecuona aprovechó la oportunidad para ofrecer conciertos en el Carnegie Hall, el Teatro Roxy, y el Capitol, además de hacer una gira por varias ciudades norteamericanas.
Ernesto Lecuona abandonó Cuba en 1960. Pasó por Nueva York, Barcelona y Málaga. En 1963 viajó a Santa Cruz de Tenerife para conocer la tierra de su padres. Allí le econtró la muerte el 26 de noviembre. Tenia 68 años. Sus restos descansan en el cementerio de Gate of Heaven, en Nueva York. En su sepelio, sus amigos y familiares entonaron su muy popular «Siboney».
Sus obras han sido interpretadas por innumerables artistas, entre ellos Alfredo Kraus, Plácido Domingo, Los Panchos, José Mojica, Miguel Aceves Mejía, Luis Miguel, José Feliciano, Paco De Lucía y muchos más.
Si le ha gustado este artículo, también podrían interesarle estos otros:
También puede ver artículos similares en nuestra sección de Música Cubana.