El imponente Monumento al Cimarrón, el homenaje a los negros cimarrones que puedes visitar en Santiago de Cuba

lunes, 8 de octubre de 2018

En el poblado de El Cobre en las afueras de Santiago de Cuba, donde se encuentra el Santuario Nacional de la Virgen de la Caridad, se halla también un monumento imponente, pero poco conocido, dedicado a los negros cimarrones que prefirieron los peligros del monte a la vida en cadenas.

Cuando se concibió el monumento sus creadores tuvieron la original idea de no crear sendas artificiales hacia él. De esa forma, los que pretendieran visitarlo tendrían que pasarlas canutas y escalar la loma para que sintieran en propia piel las dificultades que habían pasado los esclavos huidos al monte.

Como curso exprés para cimarrón las iniciativa no era mala, pero limitaba mucho la afluencia del público (entre los que no querían subir la loma y los que no podían) y dificultaba, además, los trabajos de mantenimiento del monumento; así que finalmente se construyó desde la base una larga escalera de 333 peldaños que también es de madre subirla, pero que ayuda a los que desean ver de cerca el conjunto y disfrutar de la brisa y el paisaje.

La pieza escultórica que corona el Monumento al Cimarrón es obra del escultor Alberto Lezcay y fue emplazada en el lugar en el año 1997 en un pequeño cerro que se encuentra bordeando la antigua mina de cobre. Fue esculpida en bronce y en hierro y para su confección el escultor contó con el apoyo de la UNESCO, la Casa del Caribe de la ciudad de Santiago de Cuba y la Fundación Caguayo.

Semeja la escultura una figura mítica que tiene el cuerpo y la mano de un hombre, pero la cabeza de un caballo; mide casi 10 metros de altura y se alza cual si contemplara a los negros que fueron esclavizados en las antiguas minas.