Remesas a Cuba… entre vivir y sobrevivir con FE (Familiares en el Extranjero)

sábado, 8 de diciembre de 2018

En la vida actual de la sociedad cubana una de los principales ingresos, y hasta de la nación cubana, son las remesas enviadas desde el extranjero.

A la isla llegan por diferentes vías, como giros postales que son cobrados en algunos centro de correos específicos, por transferencias bancarias o por la Western Union, empresa con sede en Estados Unidos.

Es precisamente en los Estados Unidos donde se encuentra la mayor población de cubanos emigrados, los cuales son reconocidos por la cantidad de remesas familiares enviadas a la nación cubana.

El segundo país que ha sido elegido para emigrar y que cuenta con una alta población cubana es España. Los cubanos se las han ingeniado para emigrar además a cuanto sitio les pudiera ser posible, pero eso sí, siempre encuentran una forma para pode mandar el dinero, ya sea por las vías expuestas anteriormente o por algún amigo que venga de visita y lo traiga.

En nuestra isla, llena de carencias y paciencias, esto se ha convertido en un fenómeno social. En los correos donde se pueden cobrar las remesas las colas son inigualables, ya que son los más céntricos los que ofrecen este servicio.

En todos los casos cuando el dinero va a ser entregado al beneficiario es cambiado a la moneda convertible nacional, el CUC. A cada cambio se le cobra un impuesto del 10% por el cambio efectivo.

En el proceso de la espera a que pasen las largas colas, se produce la socialización, que es un hecho particular de la cultura y la idiosincrasia de nuestra nación. Allí terminará conociendo a las personas que tiene a los lados, al frente, detrás, en fin, todos se unen a la conversación donde se puede conocer sobre disímiles temas.

Sin tapujos y sin recelos dirán de donde les llega el dinero y quien se los envía, y en el caso de los que viajaron contarán que no se acostumbraron porque la vida aquí es diferente y la gente, también es diferente.

Otro de los problemas que normalmente pudieran surgir es la posibilidad de que no halla dinero porque se acabó y entonces tocará volver a ir mañana. Otros inconvenientes son la fumigación, la falta del fluido eléctrico en algunos de los casos, solo quedan billetes de pequeño valor.

Luego de llegado el turno y recibido el dinero, la mayoría sale ya pensando que va a comprar con él, y entonces surge otro gran problema: en que lugar pudiera encontrarlo.